Hantavirus
El género Hantavirus agrupa varios virus ARN transmitidos por roedores infectados (zoonosis). En humanos, generalmente producen dos tipos de afecciones: fiebre hemorrágica con síndrome renal (FHSR) o síndrome pulmonar por Hantavirus (SPHV), una afección pulmonar muy grave. Los Hantavirus pertenecen a la familia Bunyaviridae, grupo C, y se consideran virus de riesgo de bioseguridad n° 4.
Síntomas iniciales
Los primeros síntomas del SPHV incluyen:
- Fatiga
- Fiebre
- Dolores musculares, especialmente en muslos, caderas y espalda
- Dolor de cabeza
- Escalofríos
- Mareos
- Náuseas, vómitos, diarrea o dolor abdominal
Prevención
El control de roedores dentro y alrededor de su casa es la mejor forma de protegerse de una infección. Si ha estado cerca de roedores y tiene síntomas como fiebre, dolores musculares profundos y una intensa sensación de falta de aire, consulte inmediatamente a un médico.
Tétanos
El tétanos es una enfermedad provocada por potentes neurotoxinas producidas por una bacteria que afecta el sistema nervioso y genera violentas contracciones musculares.
El agente causal, Clostridium tetani, es un bacilo anaerobio obligado, grampositivo, móvil, con una espora terminal de mayor diámetro, dándole una apariencia de baqueta. Sus esporas son estables en condiciones atmosféricas generales y pueden vivir durante años, excepto que entren en contacto con oxígeno o luz solar.
Síntomas
Con frecuencia, el tétanos comienza con espasmos leves en los músculos de la mandíbula (trismo). Los espasmos también pueden afectar el tórax, el cuello, la espalda y los músculos abdominales. Los espasmos musculares de la espalda a menudo causan arqueamiento, llamado opistótonos.
Algunas veces, los espasmos afectan músculos de la respiración, lo cual puede llevar a problemas respiratorios.
La acción muscular prolongada causa contracciones súbitas, fuertes y dolorosas de grupos musculares, lo cual se denomina tetania. Estos episodios pueden provocar fracturas y desgarros musculares.
Otros síntomas
- Babeo
- Sudoración excesiva
- Fiebre
- Espasmos de la mano o del pie
- Irritabilidad
- Dificultad para deglutir
- Micción o defecación incontrolables
Tratamiento
La herida se debe limpiar bien para eliminar la fuente de la toxina, retirando el tejido muerto y dejándolo expuesto al aire, ya que el oxígeno mata a las bacterias anaeróbicas. La penicilina (o tetraciclina para pacientes alérgicos) ayuda a reducir la cantidad de bacterias, pero no tiene ningún efecto en la neurotoxina que producen. Hoy en día, se recomienda el empleo de Metronidazol en reemplazo de la penicilina, ya que esta última posee efecto antigaba que podría tener actividad sinérgica con la toxina tetánica. También se debe administrar inmunoglobulina humana antitetánica para neutralizar la toxina circulante que aún no se ha unido a las terminaciones nerviosas, o suero antitetánico.
Prevención
El tétanos se puede prevenir mediante la vacunación. Un refuerzo de la vacuna es recomendable cada 10 años. Por lo general, se da una vacuna cada vez que un paciente sufre un pinchazo o una herida cuando no se tiene la certeza de su vacunación.
Tuberculosis
La tuberculosis (TB) pulmonar es causada por la bacteria llamada Mycobacterium tuberculosis (M. tuberculosis) y se puede adquirir por la inhalación de gotitas de agua provenientes de la tos o el estornudo de una persona infectada. Esto se denomina tuberculosis primaria. El principal causante es el Bacilo de Koch.
Síntomas
La fase primaria de la tuberculosis normalmente no causa síntomas. Cuando los síntomas de tuberculosis pulmonar se presentan, pueden abarcar:
- Tos (algunas veces con expectoración de moco)
- Expectoración con sangre
- Sudoración excesiva, especialmente en la noche
- Fatiga
- Fiebre
- Pérdida involuntaria de peso
Otros síntomas
- Dificultad respiratoria
- Dolor torácico
- Sibilancias
Tratamiento
El objetivo del tratamiento es curar la infección con fármacos que combatan las bacterias de la tuberculosis. El tratamiento de la tuberculosis pulmonar activa siempre involucrará una combinación de muchos fármacos (por lo regular cuatro). Se continúa la administración de todos los fármacos hasta que las pruebas de laboratorio muestran qué medicamentos funcionan mejor.
Prevención
- La persona infectada debe protegerse siempre que tosa con pañuelos desechables. Se evita, así, el efecto aerosol.
- Lavado de manos después de toser.
- Ventilación adecuada del lugar de residencia.
- Limpiar el domicilio con paños húmedos.
- Utilizar mascarilla en zonas comunes.
- Restringir visitas a personas no expuestas a la enfermedad.
- Garantizar adherencia al tratamiento. Vacunas (BCG).
Dengue
El dengue es una enfermedad viral aguda que puede afectar a personas de cualquier edad, siendo más susceptibles los niños y las personas mayores, y cuyo vector o agente transmisor es el mosquito Aedes aegypti (Clase: Insectos, Orden: Dípteros). Es una enfermedad eminentemente urbana y en Asia se han citado a otros mosquitos del género Aedes como vectores de menor importancia, pero no en América.
Se presenta en dos formas:
- Fiebre del dengue: enfermedad de tipo gripal, rara vez causal de muerte.
- Fiebre hemorrágica del dengue: enfermedad más grave que puede ocasionar hemorragias y hasta la muerte, sumamente grave en niños.
Contagio
Propagación de la enfermedad:
- La enfermedad se propaga por la picadura de hembras que han adquirido el virus al picar personas infectadas.
- Las hembras son las que pican por ser hematófagas obligadas, es decir, necesitan sangre para alimentarse y para que maduren los huevos.
- Pican a la mañana o al caer la tarde y lo hacen en las extremidades inferiores o manos de las personas y animales domésticos.
- Período de incubación de la enfermedad: 5 a 6 días después de la picadura.
- Contagio: puede darse desde un día antes de la aparición de los síntomas hasta 5 días después.
Síntomas
- Fiebre
- Alta cefalea
- Dolor muscular y de las articulaciones
- Pérdida del gusto y del apetito
- Erupción tipo sarampionosa en pecho y extremidades inferiores
- Náuseas y vómitos
- Dolor de estómago intenso y continuo
- Hemorragias nasales, bucales o gingivales
Prevención
- Desechar todos los objetos inservibles que estén al aire libre y que sean capaces de retener agua.
- Mantener boca abajo los recipientes que no estén en uso.
- Eliminar todos los recipientes que contengan agua.
- Despejar canaletas de techos para que corra el agua.
- Vaciar baldes y otros recipientes que puedan acumular agua.
- Control químico (uso de insecticidas) y biológico (uso de peces larvívoros para eliminar las larvas del mosquito).
Tratamiento
No administrar salicilatos como antitérmicos: pueden causar irritación gástrica y hemorragias por su acción antiagregante plaquetaria y acidosis. Utilizar preferentemente paracetamol; en niños la dosis de orientación es de 10 mg/kg repartido en 4 tomas.
La hidratación y el balance del medio interno se calcula de acuerdo a la edad y peso del paciente.
Tratamiento del shock según criterios de UTI (Unidad Terapia Intensiva).
Si se requiere internación, asegurar la ausencia de mosquitos en la sala del hospital.