Reflejo de defecación

digestión de éstos dentro del enterocito ya que hay peptidasas, las cuales van a trasformar estos péptidos en aminoácidos libres. Estos aminoácidos son los que van a atravesar la membrana basal por un mecanismo pasivo, por difusión facilitada gracias a un transportador de membrana. 2.

Absorción de aminoácidos

En la luz intestinal después de la actuación de las enzimas del borde en cepillo quedaban también aminoácidos libres, los cuales tienen distintos mecanismos para introducirse en el enterocito, pero predominan los sistemas de transporte de aminoácidos en cotransporte con Na+. Paso por la membrana apical: nos encontramos con transportadores específicos para cada tipo de aminoácido: para los neutros, ácidos y básicos.

Atraviesan el interior del enterocito. Membrana basal: pasan por difusión facilitada a través de un transportador de membrana (es decir, a favor de gradiente pero con la ayuda de un transportador de membrana). Estos transportadores también son específicos para aminoácidos neutros y básicos. La absorción de aminoácidos es un proceso globalmente activo, ya que aunque el paso por la membrana basal es un transporte pasivo, el paso por la membrana apical es activo.

Regulación movimientos colon

Estos movimientos en masa se producen como consecuencia de REFLEJOS LARGOS PARASIMPÁTICOS, y como se producen con las comidas, lo desencadena un REFLEJO GASTROCÓLICO.
Se desencadena en el estómago, cuando se distiende

la pared del estómago distal por presencia de alimento, esto estimula las eferentes parasimpáticas que llegan al colon y se da el movimiento de masa. Se puede dar un segundo reflejo que produce también movimientos en masa, el REFLEJO ENTEROCÓLICO:
Se origina en el duodeno por una distensión de su pared debido a la presencia de alimento, lo que desencadena un reflejo que va a estimular las eferentes parasimpáticas que llegan al colon. Cuando se desencadena este movimiento en masa, los responsables del aumento de la motilidad son: Neurotransmisores: Ach y Serotonina: neurotransmisor que estimula la motilidad de todo el tracto digestivo.

Hormonas

: CKK: es la más importante estimulando motilidad del colon, se secreta en intestino delgado

por presencia de grasas. Se aumentará la motilidad del colon en comidas ricas en grasa. Gastrina. El resto de movimientos estudiados anteriormente se producen por reflejos nerviosos largos y cortos
.

Reflejo de la defecación

Se integra a nivel sacro, también llamado REFLEJO RECTO-ANAL.
Es un reflejo mediado por el SNP.
Aunque se realiza de forma refleja, hay un control voluntario sobre la defecación.

PRODUCCIÓN DEL REFLEJO:

El recto normalmente está vacío y el canal anal cerrado en condiciones normales por los esfínteres anales interno y externo (EAI, EAE). Los dos contribuyen a su cierre pero El interno es el que más contribuye a mantenerlo cerrado.

EAI

: musculatura lisa. Tono de reposo alto, por lo que en reposo está en estado de contracción.

Tiene un tono elevado en reposo debido a: las fibras simpáticas directas que actúan sobre receptores α y la Ach bajo la influencia del SNP.

EAE

: musculo estriado. Inervado por fibras nerviosas somáticas que proceden del sacro. Van vehiculizadas pos los N pudendos (son parasimpáticos). La descarga de Ach a este nivel mantiene el tono de reposo alto.

DESENCADENAMIENTO DEL REFLEJO DE LA DEFECACIÓN:

El reflejo de la defecación se desencadena como consecuencia de haberse producido un movimiento en masa, el cual hace se distienda el recto por presencia de heces, y esta distensión la captan los mecanorreceptores del recto, desencadenándose 2 reflejos:

REFLEJO CORTO LOCAL

: la pared del recto se contrae y el esfínter interno se relaja.

Es un reflejo débil, por sí solo no da lugar a la defecación, pero se suma otro sobre este.

REFLEJO LARGO

: es el que es realmente potente. La información de distensión de la pared del recto captada por los mecanorreceptores es una información sensorial que va vehiculizada por los nervios pélvicos que son parasimpáticos y va hacia el sacro, la zona donde se integra el reflejo. A partir del sacro, esta información sensorial asciende y va hacia la corteza cerebral. Al llegar a la corteza nos hacemos conscientes de la necesidad de defecar. En el sacro se integra la información, y se estimula eferentes motoras que parten del sacro y son de esos mismos nervios pélvicos que llegan a inervar la pared del recto y llegan al esfínter anal interno, produciendo una contracción de la

pared del recto y una relajación del esfínter interno. Cuando se desencadena el reflejo parten los nervios pudendos que van al EAE, que en un primer momento aumenta el nivel de contracción de éste. La contracción se produce por acción de la Ach. El VIP y el NO se encargan de la relajación de los esfínteres.
Si las condiciones son adecuadas
, cuando se desencadena el reflejo, relajamos el EAE y se produce la defecación. Cuando se relaja el EAI, como su contracción es la principal del cerrado del recto, el canal anal se abre y pasan heces al canal anal. Aquí se produce el muestreo anal:
En el canal anal hay receptores sensoriales de muchos tipos, pero hay unos que distinguen la presencia de material sólido, de material líquido o la presencia de gases, y en función de esa

detección, nosotros decidimos si relajamos el esfínter o no.
Si las condiciones no son buenas cuando se produce el reflejo
, si contraemos voluntariamente el EAE, en menos de un minuto se desencadena un REFLEJO DE ADAPTACIÓN:
la pared del recto se relaja para mantener el contenido, el EAI se contrae de nuevo y vuelve a su tono de reposo normal. (Ya no hay distensión del recto, por lo que ya no tienes ganas de defecar).

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