Conceptos Fundamentales de Prevención
La prevención se clasifica en tres niveles principales, enfocados en evitar, mitigar o reducir las consecuencias de los accidentes o daños:
Prevención Primaria
Incluye todas las acciones destinadas a evitar que se produzcan accidentes, como el desarrollo de hábitos de trabajo prudentes, el comportamiento vial consciente, la práctica deportiva con cautela o, en general, la adopción de un estilo de vida saludable.
Prevención Secundaria
Tiene como objetivo la protección, disminuyendo el número y la gravedad de los daños o lesiones en el caso de que se produzca un accidente. Así, se contempla el diseño y mantenimiento de entornos seguros (mantenimiento del suelo despejado para evitar caídas, dispositivos de airbag en los coches) o el empleo de medidas de protección (uso de cinturón de seguridad, de los equipos de protección individual en el trabajo, etc.).
Prevención Terciaria
Su finalidad es anular o reducir las consecuencias de un accidente, una vez que haya ocurrido, mediante una intervención rápida y eficaz. Son medidas de este tipo: el uso de mecanismos automáticos de alarma, la llamada al 112, la disposición de un botiquín de urgencias o la intervención rápida en primeros auxilios.
Sistemas Reguladores del Organismo
La Función Neurológica
Integra todas las funciones de regulación del organismo y de coordinación de sus distintas acciones. El sistema nervioso es el encargado de realizar esta función. Está formado por unos centros nerviosos —cerebro, cerebelo, tronco encefálico y médula espinal— que reciben información del exterior —a través de los sentidos— y del medio interno del cuerpo. Con esta información, elaboran respuestas para atender las necesidades de cada momento, y las envían, a través de los nervios, a los músculos y las glándulas. Así hacen posible el movimiento del cuerpo y el funcionamiento de los órganos.
Centros Nerviosos y sus Funciones
- El tronco encefálico rige algunas funciones inconscientes, como el ritmo respiratorio o el ritmo cardíaco.
- El cerebelo, algunas actividades motoras básicas.
- La corteza cerebral, las funciones más complejas: sensitivas, del lenguaje, movimientos voluntarios, etc.
Si se produce una lesión grave en alguna de estas áreas, ya sea a causa de un traumatismo o de una enfermedad, las actividades que lleva a cabo pueden verse afectadas; por ejemplo, pérdida de visión, de movilidad, del habla, del razonamiento, etc. La médula espinal actúa como vía por donde transitan las órdenes de los centros nerviosos a las diferentes partes del cuerpo. En consecuencia, las lesiones medulares pueden interrumpir esta transmisión y dejar sin sensibilidad o paralizada la parte del cuerpo por debajo de la zona medular afectada.
La Respiración
Es un proceso complejo, que lleva oxígeno (O₂) del aire ambiental a cada una de nuestras células —donde es utilizado en las reacciones químicas de producción de energía— y que evacúa al exterior el dióxido de carbono (CO₂) generado en las células. Necesitamos la energía producida para mantener nuestra temperatura, para mantener el cerebro en funcionamiento y, en general, para mantenernos con vida. El proceso completo de la respiración se produce en dos fases:
Fases de la Respiración
- La respiración externa: Se lleva a cabo en los pulmones. El oxígeno que contiene el aire ambiental pasa a la sangre y el dióxido de carbono que lleva la sangre se expulsa al exterior.
- La respiración interna: Se produce a nivel celular. El oxígeno que transporta la sangre se distribuye a todas las células del organismo, mientras que el dióxido de carbono generado en las células se vierte a la sangre.
Para completar el proceso de la respiración es necesaria la acción conjunta de los aparatos respiratorio y circulatorio.
El Aparato Respiratorio
Está formado por las vías respiratorias y los pulmones.
Vías Respiratorias
Son los conductos que hay entre el exterior y los pulmones. A través de ellas entra y sale el aire. Son, sucesivamente, las fosas nasales y la boca, la faringe, la laringe, la tráquea y los bronquios.
Pulmones
Son dos órganos formados por una tupida red de pequeños sacos de aire, denominados alvéolos.
Alvéolos
Son esferas microscópicas, agrupadas en racimos, que cuelgan de los bronquios más pequeños. Dentro de los alvéolos hay aire y, rodeándolos, están los capilares llenos de sangre. En los alvéolos se efectúa el intercambio de gases.
Fisiología Respiratoria
Se lleva a cabo la respiración externa, que se divide en dos fases: la ventilación pulmonar y el intercambio de gases.
La Ventilación Pulmonar
Es el proceso mediante el cual se llenan y vacían de aire los alvéolos pulmonares. Se desarrolla en un movimiento cíclico en dos fases:
- La inspiración o aspiración del aire exterior, cargado de oxígeno.
- La espiración o expulsión del aire pulmonar, cargado de dióxido de carbono.
El Intercambio de Gases
Es el proceso de transferencia de oxígeno y dióxido de carbono entre los alvéolos pulmonares y la sangre. Esta función se realiza continuamente, mediante dos procesos simultáneos:
- El oxígeno, procedente del exterior, llega a los alvéolos y atraviesa sus paredes hasta la sangre, que se carga de hematíes.
- El dióxido de carbono, que viajaba disuelto en la sangre venosa, pasa a los alvéolos.
Con este intercambio, la sangre venosa, con mucho dióxido de carbono, se convierte en sangre arterial, cargada de oxígeno.
La Función Circulatoria
La función circulatoria transporta la sangre por todo el organismo. En este recorrido distribuye el oxígeno y los nutrientes que necesitan las células, y recoge las sustancias de desecho que estas generan.
Componentes del Aparato Circulatorio
El encargado de realizar esta función es el aparato circulatorio o cardiovascular. Este aparato está formado por:
- La sangre, el medio líquido en el cual se transportan las sustancias.
- Los conductos por donde circula la sangre por todo el cuerpo: las arterias, los capilares y las venas.
- El corazón, un músculo que se contrae y se relaja alternativamente, actuando como una bomba impulsora.
El Ciclo Cardíaco
El corazón efectúa un movimiento rítmico de contracción y relajación denominado ciclo cardiaco. Este ciclo se compone de dos fases:
- La sístole. El corazón se contrae y, con ese movimiento, se vacía e impulsa la sangre hacia los conductos.
- La diástole. El corazón se relaja y se dilata, movimiento con el cual aspira la sangre de las venas y se llena.
El Sistema Eléctrico del Corazón
Para que todas sus fibras musculares se contraigan de una manera coordinada, es decir, en el momento oportuno, el corazón cuenta con un sistema de generación de impulsos nerviosos y de difusión de estos por el músculo cardiaco.
El ritmo de generación de impulsos —y el ritmo de latidos cardiacos consiguiente— se adapta a las necesidades del cuerpo mediante el sistema nervioso.
Así, el ritmo se acelera, por ejemplo, cuando practicamos deporte o en situaciones de tensión.
Trastornos Cardíacos
En ocasiones, los impulsos circulan de manera caótica por el corazón, con lo que la contracción cardiaca se descoordinada y el bombeo de sangre resulta ineficaz. Este trastorno, denominado fibrilación ventricular, puede llevar a la muerte, por lo que es una emergencia médica y precisa una intervención rápida y acertada.
La Parada Cardiorrespiratoria (PCR)
Es la suspensión, generalmente inesperada y a veces reversible, de las funciones respiratoria y circulatoria espontáneas.
Con esto se interrumpe la llegada de oxígeno a los órganos. El cerebro es el más sensible, ya que puede sufrir daños irreversibles si la interrupción se prolonga más allá de 4-6 minutos. La parada cardiorrespiratoria puede estar causada por un infarto cardíaco, por asfixia, por inhalación de gases o humos tóxicos, por electrocución, por un corte de digestión, por sobredosis de drogas o medicamentos, etc. Ante una parada cardiorrespiratoria, es necesario iniciar en muy poco tiempo la resucitación cardiopulmonar (RCP) para intentar recuperar la respiración y la circulación espontánea.
Niveles de Atención Sanitaria
La Atención Primaria
Es el punto natural de acceso de las personas al sistema sanitario, donde se atienden los problemas de complejidad baja o media. Se lleva a cabo en los centros de salud.
En poblaciones pequeñas o zonas rurales existen unos consultorios de atención primaria para acercar los servicios sanitarios de primer nivel a la población. Estos consultorios dependen de un centro de salud o están relacionados funcionalmente con él. El conjunto de los profesionales que trabajan en el centro de salud y los consultorios constituye el equipo de atención primaria, integrado por equipos multidisciplinarios que incluyen medicina de familia, pediatría, personal de enfermería, etc.
La Atención Especializada
El segundo nivel de atención es la atención especializada, que se ocupa de los motivos de consulta más graves o complejos y que requieren conocimientos más profundos de la especialidad y recursos técnicos superiores. Se accede por derivación desde la atención primaria o desde los servicios de urgencias hospitalarios. Los servicios que suele ofrecer son:
- Atención especializada ambulatoria o consultas externas. Atiende personas que deben ser visitadas por especialistas.
- Hospitalización en régimen de ingreso, cuando es necesaria una atención más especializada y una intervención quirúrgica.
- Atención de urgencias, para situaciones que exigen una atención rápida e inmediata debido a la gravedad del caso.
- Atención en hospital de día, donde se dispensan los tratamientos médicos que no precisan hospitalización durante más de un día.
061: cuando sea una emergencia de tema sanitario. Protección civil: ayudan a la seguridad y prevención. Se puede llamar en caso de emergencia.
Primeros Auxilios y Cadena de Asistencia
Primeros Auxilios
Los puede iniciar cualquier persona que se encuentre en una situación que lo exija, pero aumentará su eficacia si ha recibido formación en la materia. En ese caso, será considerada como socorrista o proveedora de primeros auxilios. El ILCOR se pronuncia sobre las capacidades que debería tener esta figura:
Competencias del Socorrista
- Reconocer, evaluar y priorizar la necesidad de los primeros auxilios.
- Proporcionar los cuidados necesarios, usando las competencias adecuadas.
- Reconocer las propias limitaciones y saber buscar ayuda cuando sea necesario.
Estas competencias son necesarias para sintonizar con los objetivos que se establecen para la intervención en primeros auxilios, que se concretan en:
Objetivos de la Intervención
- Preservar la vida de la víctima.
- Aliviar su sufrimiento.
- Prevenir la aparición de más daños.
- Promover su recuperación.
Los Primeros Auxilios en la Cadena de Asistencia Sanitaria
Son el primer eslabón de la cadena de asistencia sanitaria. Tras valorar el estado de la víctima y sus necesidades de atención, se seguirán estos tres niveles de atención urgente:
Niveles de Atención Urgente
- El primer nivel es el de primeros auxilios, es decir, la atención por personal no sanitario, en el lugar de los hechos, con los medios que se tengan al alcance. Tiene tres posibles desenlaces:
- Si los problemas son leves, podrán solucionarse con cierta facilidad, por ejemplo, aplicando pequeñas curas. Podrá ser suficiente con esta intervención, pero es recomendable acudir al centro de salud para una revisión más completa.
- Si el problema no es grave, pero no le podemos dar una respuesta suficiente, deberemos trasladar la víctima al centro sanitario o llamar al 112 o al 061 y seguir sus instrucciones.
- Si se trata de un problema grave o que amenaza la vida, se tendrá que llamar al 112 y solicitar atención especializada. Desde allí movilizarán los recursos profesionales necesarios y darán, telefónicamente, las indicaciones de actuación hasta que éstos lleguen.
- El segundo nivel es la atención sanitaria profesional, llevada a cabo por los equipos de emergencias en el mismo lugar de los hechos, pero con los medios adecuados.
El Marco Legal y Ético de la Prestación de los Primeros Auxilios
Son cuestiones importantes que configuran las repercusiones legales de las acciones y omisiones en la prestación de la asistencia a una persona que necesita ayuda. Por ello, es necesario fijarnos en estos tres aspectos:
- La obligación de actuar.
- La necesidad de obtener el consentimiento de la persona atendida.
- La responsabilidad legal de tus actuaciones asistenciales.
La Obligación Ética y Legal de Actuar
Todas las personas tenemos el deber ético de ayudar a quien lo necesite. Este deber es especialmente exigible cuando la persona ha sufrido un accidente o padece una enfermedad grave que pueden matarla o dejarle secuelas. La obligación ética se corresponde con una obligación legal de atender a las personas que lo necesitan, y por eso la ley castiga a quienes no ayudan a las que están en grave peligro. La ley exige que se ayude a las personas que se encuentren en peligro grave y claro, pero no a otras personas ajenas: es la prestación de ayuda siempre pone en peligro a quien presta la asistencia.
La Responsabilidad Legal de tus Actuaciones
Hay casos que pueden tener posibilidades legales. Aquellos en los que se tomen decisiones muy equivocadas en base a los conocimientos de las personas.
