Regeneración y cicatrización

 desarrollo de los diseminados tengan lugar en las mejores condiciones. Por eso suele resultar apropiado estimular la mineralización de los restos orgánicos, mediante un laboreo superficial del terreno.

2º. Masas de tipo xerofítico

Los suelos se encuentran muchas veces desecados, endurecidos y desprovistos de materia orgánica, por lo que el laboreo tiene también aquí un marcado efecto positivo sobre la conservación de la humedad y si se hace en momentos de diseminación facilita el desarrollo de la regeneración

.3º. Masas de tipo higrofítico

El factor luz es esencial y un aumento de la iluminación por apertura de la cubierta, junto con una preparación adecuada del suelo, tienen el efecto positivo de estimular la descomposición de CUIDADOS CULTURALES DEL VUELO CORTAS DE MEJORALIMPIAS:
Eliminación del material vegetal extraño al vuelo de la masa principal.

CLAREOS

Apeo y extracción de los pies sobrantes de la masa en los estados de repoblado y monte bravo, favoreciendo el desarrollo de los que habrán de constituir la masa principal. Se cortan los pies más conformados y se conservan los más vigorosos y desarrollados, bien de un modo uniforme o por fajas.

CLARAS

Apeo y extracción de pies sobrantes de la masa, en los estados de latizal y fustal, de modo que en cada estado de desarrollo la espesura se mantenga lo más próxima posible a la espesura normalClasificación de los pies de la masa:

Pies dominantes

Copas se extienden por encima del nivel general de la cubierta con total iluminación por encima y parcial lateralmente. Pies de mayores dimensiones que la media de la masa, con copas bien desarrolladas.

Pies codominantes

El nivel general de la cubierta de copas, recibiendo iluminación por encima y poca lateralmente. Las copas son de desarrollo medio y apretadas lateralmente.     

Pies intermedios

Árboles de menos altura que los precedentes, con copas incluidas dentro de la cubierta general. La luz recibida es poca por encima y casi ninguna lateralmente. Las copas son reducidas y apretadas por los lados.

Pies dominados

Son árboles sumergidos, con sus copas a un nivel inferior al de la cubierta general, que no reciben luz ni por encima ni lateralmente.
superdominantes o predominantes, o pies de desarrollo superior a todos los demás, con copas descollantes, plenamente iluminadas.

Tipos de claras



I.

Claras por lo bajo

Extracción de pies de las clases de copa inferiores. Actúan sobre pies dominados e intermedios, fundamentalmente aunque en casos de claras fuertes de particular intensidad pueden también afectar a pies codominantes.II.

Claras por lo alto

Actúan extrayendo pies de las clases de copa superiores, rompiendo la cubierta y favoreciendo el desarrollo de los pies de más porvenir de estas mismas clases. La mayor parte de los pies que se apean son de la clase codominante, pero también se cortan algunos intermedios comprimidos y dominantes que interfieren con el desarrollo de los pies de buen potencial. III.

Claras selectivas

Se extraen los pies dominantes para estimular el crecimiento de los de las clases inferiores. Es un tipo de clara sólo adecuado para propósitos limitados y si no se realiza con especial cuidado puede degenerar en una especie de entresaca por huroneo.IV.

Claras sistemáticas:

Los pies a extraer se eligen por un criterio posicional predeterminado, utilizándose generalmente esta técnica en masas jóvenes que todavía no han sido aclaradas.

Cuantificación e intensidad de las claras:

Se suele emplear como índice para la cuantificación de una clara, la relación d/D en que d es el diámetro medio de los pies extraídos y D el de la masa antes de la clara. Si d/D < 1,=»» la=»» clara=»» es=»» por=»» lo=»» bajo.=»» si=»» d/d=»»> 1, la clara es selectiva. Si d/D = 1, clara sistemática. Según Schoberg, las claras según su peso, pueden dividirse en: Débil: La que extrae menos del 5% del A.B. Con un máximo de 25 m2/Ha. Mediana: Extrae del 5 al 10% del A.B. Con un máximo de 60 m2/Ha. Fuerte: Extrae más del 10% del área basimétrica.

Comienzo de las claras y mantenimiento de la espesura:

la primera clara debe realizarse tan pronto como empiece a apreciarse la competencia entre los pies de la masa, cuando las copas empiezan a juntarse o cuando las ramas bajas empiezan a podarse de modo natural, hacia el final de la clase natural de edad de monte bravo-principio de la de latizal. Si no se han hecho extracciones de pies sobrantes con anterioridad, la necesidad de claras aumenta y su efecto beneficioso resulta más patente. Las especies de sombra, más adaptadas a la competencia por la luz, aceptan un retraso en el comienzo de las claras, en relación con las especies intolerantes. Cuando se han podado artificialmente los pies de la masa principal, hay que aclarar en su favor inmediatamente por la pérdida de capacidad fotosintética que introduce la poda en ellos. Las consideraciones económicas dan como resultado un retraso de la primera clara, hasta que pueda obtenerse un producto pecuniario de la venta de madera. Una vez ejecutada la primera clara , la periodicidad entre aquélla y la siguiente o siguientes, y de éstas entre sí, junto con la de su peso o intensidad, depende de las especies forestales, el turno y la espesura normal recomendable, es decir, de la planificación de las claras a aplicar. Esta es la fase del ciclo forestal que empieza en el final de la clase de monte bravo y dura hasta el inicio de las cortas de regeneración. Es factible expresar la intensidad de las claras en función del área basimétrica residual (después de la clara) siempre que nos mantengamos en el intervalo dentro del cual el crecimiento es óptimo e independiente de la espesura de la masa Otro índice de espesura que puede ser de utilidad es el coeficiente de Hart-Becking que relaciona el nº de pies con la altura dominante.

TRATAMIENTOS PARCIALES (2)PODAS

Se basan en la consideración del equilibrio vegetativo que se establece entre el sistema aéreo y el radical y las interrelaciones entre ambos. Las podas intensas perjudican el árbol por la reducción de la superficie foliar y de asimilación fotosintética que suponen. Sin embargo, si la potencia asimilativa del sistema aéreo excede a la del sistema radical, los árboles pueden podarse sin menoscabo de su crecimiento, porque la copa tenderá a actuar con mayor intensidad, supliendo la actividad de la parte suprimida, siempre que al final se restablezca el equilibrio entre la raíz y la parte aérea.

Poda natural:

El proceso por el cual los factores físicos y bióticos de medio ocasionan la eliminación de las ramas, y consta de tres etapas: muerte, desprendimiento y oclusión o cicatrización. La velocidad con que mueren las ramas bajas depende en buena parte de la densidad inicial de la masa. Cuando las copas se hacen tangentes con las de los árboles próximos empieza a disminuir la luz que llega a las ramas más bajas y éstas acaban muriendo. Una buena densidad de la masa tiende a reducir el diámetro de las ramas en el momento de su muerte y cuanto menor sea aquél más rápido será el desprendimiento y mejor la calidad de la madera. Las ramas viven más tiempo y crecen más en la parte media y alta del tronco que en la parte baja. En suelos pobres desarrollan madera de mejor calidad, con ramas menores, aunque en suelos más fértiles, los entrenudos son más largos.             Al morir la rama es atacada por hongos e insectos, hasta que rompe y se desprende. Finalmente se produce la oclusión del muñón de la rama y su cicatrización. La velocidad de cicatrización depende del crecimiento en diámetro del tronco. El nudo de una rama viva tiene su máximo espesor en el punto de su inserción en el tronco y su diámetro disminuye rápidamente. El nudo muerto se forma hacia adentro de la madera y tiene tendencia a desprenderse, por lo que constituye un defecto de la madera más grave que cuando se trata de nudos vivos.La poda natural tiene el inconveniente de que necesita plazos de tiempo muy largos para conseguir una buena calidad de la madera Objetivos y tipos de poda:
mejora de la calidad de la madera en períodos de tiempo aceptables. Debe adaptarse a las diferencias existentes en la forma de crecimiento entre coníferas y frondosas, las podas propiamente dichas, que consisten en la eliminación de ramas bajas para conseguir fustes de madera limpia, actuación típica en masas de coníferas; y tallas de formación, o cortas de ramas que persiguen mejorar la forma del árbol, eliminando bifurcaciones, ramas competidoras con la guía, etc., que se practican con frondosas, aunque éstas precisan también de las podas. La selvicultura tradicional extensiva se vale de la regeneración natural, el mantenimiento de la espesura adecuada y el acompañamiento de especies accesorias para conseguir fustes altos y limpios de ramas, podados naturalmente en los pies de la masa principal. En cambio, la selvicultura intensiva moderna utiliza la repoblación a bajas densidades, técnicas de mejora genética y necesita de la poda y tallas de formación para lograr una buena calidad de la madera.
poda de penetración se realiza con el fin de permitir el acceso y circulación por el interior de la masa aparte por supuesto de la mejora de la calidad de la madera que toda poda produce. Consiste en la eliminación de ramas hasta una altura que conviene que llegue a los 2,5 m, que es la longitud habitual de las piezas o apeas comerciales. Suele ejecutarse en todos los pies del rodal.

Poda de coníferas

La poda da a los fustes una forma cilíndrica es comparación con el árbol no podado que adopta una forma cónica. La eliminación de ramas bajas favorece el crecimiento de la guía terminal y mejora la calidad de la madera.

Poda de frondosas

Las frondosas presentan una dominancia apical más débil que las coníferas, lo que se manifiesta en la aparición de bifurcaciones, ramas que compiten con la guía, etc. La eliminación de esas ramas sobrantes para mejorar la forma del árbol y la derechura del fuste, resulta imprescindible muchas veces y es lo que se conoce como tallas de formación.
Las tallas de formación comprenden un conjunto de operaciones que tienen como objetivo la formación y regeneración de la guía terminal o bien la eliminación de ramas laterales nocivas.

Podas con fines distintos de la producción de madera

Son podas que se realizan para favorecer la producción de bellotas o de corteza (corcho).

Herramientas y práctica de la poda

Son de variados tipos y en su conjunto abarcan las distintas posibilidades en cuanto a grosor de las ramas y altura máxima a alcanzar.Las tijeras de podar sirven para la corta de ramas de 1 cm, en niveles de poda bajos con árboles jóvenes. Existen tijeras enmangadas sobre pértiga telescópica de 2,25 a 3 m de largo, que permiten la corta de ramas de menos de 3,5 cm de diámetro hasta alturas de 5 m. También hay tijeras de mango doble largo de 80 cm que cortan ramas de menos de 2,5 cm. Se dispone también de varios modelos de sierras, desde las de mango corto que se utilizan en podas bajas o bien con escaleras a mayor altura, hasta las que van montadas sobre mangos de 1-1,5 m de largo, en poda de frondosas. Otros modelos para poda de coníferas de sierra con caña telescópica, permiten eliminar ramas de diámetro inferior a 2 cm, hasta 6 m de altura. El hacha es utilizada corrientemente en las podas, aunque requiere un buen grado de destreza en el operario para la correcta ejecución de la corta.      Se usan motosierras ligeras especiales para este tipo de trabajo. Finalmente, existe el llamado robot podador o sierra trepadora, En podas de choperas realizadas generalmente por empresas especializadas se utilizan cestas montadas sobre tractor agrícola, en la que trabaja un operario con motosierra hasta 8 m de altura en condiciones muy favorables de terreno llano y desbrozado.
época de poda para mejora de la calidad de la madera: Corta de ramas finas de diámetro inferior a 2 o 3 cm o de ramas secas: puede hacerse en cualquier época. Ramas de diámetro superior a 2 o 3 cm: Frondosas en general: la mejor época es hacia finales del mes de Julio. Coníferas: en época de paralización vegetativa durante el invierno.

MONDA

Consiste en cortar todas las ramas del árbol dejándole solamente la guía terminal. Supone una reducción brutal de la superficie de asimilación fotosintética de la copa. Al llegar la brotación en la primavera siguiente el árbol emite brotes a partir de yemas durmientes, pero sin que de este modo se restablezca el equilibrio. Cuando este tipo de poda se repite, el árbol resulta muy afectado, suelen desarrollarse zonas de pudrición y se origina una forma exageradamente cónica. Se ha aplicado la monda a chopos y a veces al piso piñonero en l sur. En el primer caso para la utilización de las ramas como ramón para el alimento del ganado. En Galicia es fácil encontrar robles (Quercus robur) que son podados de esta manera.

ESCAMONDA

Es la supresión de ramas muertas e inútiles que se desarrollan en el tronco de árboles aislados. Esto, al revés que lo anterior, resulta beneficioso para el árbol y para la calidad de la madera.
TRATAMIENTO DE MONTE BAJO es un procedimiento de carácter cultural que requiere la facultad de brotar de cepa (o raíz) en las especies a las que se puede aplicar. En general las especies frondosas que se tratan en monte bajo –cuando las plantas proceden de semilla inicialmente- poseen un máximo vigor para la reproducción vegetativa hacia el estado de latizal. Tipos de brotes: a) de yemas proventicias b) de yemas adventicias c) de raíz La edad correspondiente varía de modo general entre los 15 y 40 años, formándose entonces cepas resistentes y suficientemente gruesas para admitir el tratamiento, pudiendo producir brotes vigorosos y de rápido crecimiento.  Una vez formadas las cepas el período total de tiempo durante el cual éstas mantienen su capacidad de rebrote es variable con las especies. En general es mayor en las de maderas duras y crecimiento lento.               

TRATAMIENTOS DE MONTE MEDIO

1.

Formas de monte medio

Masas resultantes de la combinación o superposición de la masa de monte alto con la de monte bajo. Está configurada por 2 pisos: inferior, constituido por matas o chirpiales de regeneración vegetativa (una masa de monte bajo generalmente regular y raramente entresacado); y superior, constituido por un fustal claro bien de frondosas o resinosas, regenerado por semilla (brinzales), (por una masa clara de monte alto más o menos irregular). Este tipo de masa se denomina monte medio irregular. Piso bajo: chirpiales. / Piso alto: brinzales. Tb es monte medio el formado por 2 pisos, inferior y superior, ambos procedentes de brotes de cepa; el primero, generalmente de monte bajo regular se compone de chirpiales (subresalvos) y el segundo, compuesto de chirpiales reservados (resalvos). Este tipo de monte medio se conoce como monte medio regular.
Piso bajo: chirpiales. / Piso alto: chirpiales reservados.

Monte medio regular:

El piso inferior del monte medio regular está representado por un monte bajo regular y el superior, por resalvos de distintas clases cuyo turno de aprovechamiento es un múltiplo del turno del monte bajo. Así pues, el tratamiento consistirá en cortas a matarrasa en el piso inferior, con reserva de subresalvos, combinados con cortas de entresaca en el piso superior de resalvos, con regeneración por brotes y a veces también diseminatoria. Las edades de corta de los resalvos vienen siendo las siguientes:- Robles: 125 años.- Fresnos, encina, alcornoque: 100 años.- Carpe, abedul, aliso: 75 años.

Monte medio irregular

El tratamiento consiste en cortas a matarrasa en el piso inferior, combinadas con cortas de entresaca en el piso superior, con regeneración por brotes y por diseminación natural y si resulta necesario también por repoblación artificial.

Monte medio adehesado

Cortas de recepe a matarrasa en el piso inferior de matas, con reserva de chirpiales, seguidas de cortas en pequeñas superficies en el fustal claro y en caso necesario, de repoblación..

Ventajas e inconvenientes

El monte medio es productor de recursos variados: maderas, leñas, corcho, frutos, comercializables en general en un ámbito local. El capital, tiene aquí la posibilidad de ser aumentado a voluntad fácilmente, lo que representa una ventaja para la propiedad privada. La doble cubierta de vuelo asegura una más eficaz protección del suelo. La regeneración natural suele conseguirse sin dificultad. Es una forma de masa muy adecuada para el fomento cinegético, en particular de la caza mayor. Inconvenientes: El correcto equilibrio a mantener entre los pisos superior e inferior impone una gestión muy precisa y continuada. No resulta fácil la conservación de la adecuada distribución de resalvos en el monte medio regular. Los pies maderables del piso superior son de menor calidad que en el monte alto, con fustes más cortos y ramosos. En las etapas inmediatamente posteriores a la corta del piso inferior de monte bajo los suelos quedan más expuestos a los efectos de posibles sequías. El fustal claro resulta también más expuesto al empuje del viento y cuando se trata de especies de corteza lisa, sensibles a la insolación intensa, pueden producirse daños de desecación. El monte medio regular requiere suelos más fértiles en general que el monte alto.

TRATAMIENTOS TRANSITORIOS

TRANSFORMACIONES.
Aquel tratamiento transitorio q x exigencias selvícolas tiende al cambio de tratamiento principal o método de corta de la masa, sin variar el método de beneficio. No todas las formas de masa tienen la misma aptitud para transformarse y puede haber casos en que una determinada transformación resulte imposible en la práctica, como x.E., la de monte alto irregular a otro regular cuando las condiciones de regeneración sean muy difíciles y se necesiten plazos de tiempo para aquélla muy superiores al período de regeneración máximo de masas regulares.

Transformación de monte alto irregular en regular

Para que sea posible la masa a transformar debe encontrarse en alguna de las situaciones siguientes: a) Masa con pocos pies maduros, es decir, de clases diamétricas elevadas y con un estrato de arbolado joven integrado por abundantes y vigorosas plantas, lo que indica facilidad de regeneración natural, que es posible que se beneficie de algún cambio favorable en las condiciones de la estación. La transformación consistirá en la corta del arbolado viejo procurando hacer el menor daño posible a la masa joven, con desramado de pies si fuera preciso y en el caso de existir claros en la masa joven, conservando algún tiempo una parte del arbolado maduro para conseguir la regeneración. B) Masa en un estado opuesto al del caso a, es decir, con abundancia de árboles de las últimas clases diamétricas, vigorosos y un estrato bajo de repoblado reviejo y deficiente. Entonces se procede a eliminar el repoblado deficiente y se ponen en marcha las cortas de regeneración en el arbolado adulto para conseguir un nuevo regenerado de mejor calidad. En algún caso puede conservarse una parte del regenerado preexistente, aplicándole los cuidados culturales adecuados para su mejora.

Transformación de monte alto regular en irregular

Esta transformación se consigue con el empleo de cortas de entresaca. Se prescinde de las divisiones en tramos y de la aplicación del turno y se sustituyen por el de monte entresacado ideal, que servirá de guía para determinar los números de pies de cada clase diamétrica a extraer en las cortas de entresaca.

CONVERSIONES


Conversión de monte alto en monte bajo

Requiere establecer en primer lugar el turno a aplicar al monte bajo, dividíéndose luego la superficie en tantos tramos o tranzones como años tenga el turno. Estos tramos serán de igual superficie si la calidad es la misma, o de superficies inversamente proporcionales a las calidades respectivas, para que en todo caso resulten aproximadamente equiproductivos. Una vez establecidos los tranzones se cortará uno de ellos cada año. La corta de cada tranzón será a hecho, dejando sin cortar los pies que por su juventud no garanticen un buen rebrote. Estos pies se reservarán hasta que su edad o el diámetro sean los adecuados. Las complicaciones del método aparecen cuando existen árboles o grupos de árboles que por su edad avanzada han perdido la capacidad de brotar de cepa. Entonces se les somete a cortas de regeneración por semillas y cuando la regeneración está establecida y los pies maduros se han extraído, los nuevos brinzales deben dejarse crecer hasta que puedan cortarse para su reproducción por brotes.

Conversión de monte bajo en monte alto

Implica un incremento de capital vuelo en relación con el inicial del monte bajo y x lo tanto supone un proceso de acumulación, q excluye la percepción de rentas en tanto no se consiga la nueva estructura de masa (el monte alto).El tránsito del monte bajo al monte alto pasa de un modo natural por la etapa de transición del monte medio, concretamente el monte medio regular normal.

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