Biología Humana: Estructura Celular, Tejidos, Nutrición y Sistemas Vitales

La Célula: Unidad Fundamental de la Vida

La célula es la unidad básica de la que están hechas todas las cosas vivas. Es la unidad más pequeña capaz de realizar todas las funciones que caracterizan a un ser vivo.

Tipos de Organismos según su Composición Celular

Dependiendo de si un cuerpo está formado por una o más células, los organismos pueden ser:

  • Organismos unicelulares: Se componen de una sola célula que realiza todas las funciones necesarias para la supervivencia. A veces, varios organismos unicelulares viven juntas formando colonias (como la ameba).
  • Organismos multicelulares: Consisten en varias células que pierden la capacidad de sobrevivir solas. Cada célula lleva a cabo una tarea específica y todas trabajan juntas para la supervivencia del cuerpo (como las plantas y los animales). Nuestro cuerpo está compuesto de un gran número de células. Las personas somos seres multicelulares.

Estructura de la Célula

Las células en nuestro cuerpo pueden tener diferentes formas y tamaños, y todas ellas poseen:

  • Membrana celular o plasmática: Es una capa delgada que rodea la célula y establece las fronteras entre esta y el medio extracelular.
  • Citoplasma: Es el contenido de la célula, excluyendo el núcleo. Se trata de una solución acuosa en la que se encuentran una variedad de estructuras, llamadas orgánulos, que llevan a cabo funciones diferentes.
  • Núcleo: Es una estructura esférica y está situada generalmente en el centro de la célula. Contiene el material genético con la información necesaria para dirigir y controlar las funciones celulares.

Orgánulos Celulares

Los orgánulos son estructuras especializadas dentro del citoplasma:

  • Mitocondrias: Son orgánulos de forma ovalada, con una doble membrana que encierra un espacio interior. Proporcionan energía a la célula para su funcionamiento.
  • Retículo endoplásmico: Se trata de un conjunto de sacos membranosos y conductos de conexión que se extiende por todo el citoplasma de la célula. En el retículo se fabrican diversas sustancias. Hay dos tipos:
    • Áspero (Rugoso): Con ribosomas adheridos a la superficie exterior de la membrana.
    • Liso: Sin ribosomas adheridos.
  • Vacuolas: Son vesículas membranosas que contienen agua con sustancias disueltas. Almacenan productos de reserva o de desecho.
  • Ribosomas: Son pequeñas partículas que aparecen tanto libres en el citoplasma como adheridas a las membranas del retículo endoplásmico. Se encargan de sintetizar las proteínas.
  • Lisosomas: Son vesículas membranosas en las que se transforman sustancias complejas en otras más simples que la célula puede utilizar.
  • Citoesqueleto: Se trata de un conjunto de filamentos que se distribuyen por todo el citoplasma, formando una red. Son el «esqueleto» de la célula y participan en sus movimientos.
  • Centríolos: Son dos cilindros huecos cuyas paredes están formadas por filamentos. Dirigen el movimiento del citoesqueleto.
  • Aparato de Golgi: Está formado por pilas de sacos membranosos aplanados, rodeados de pequeñas bolsas en las que se empaquetan sustancias fabricadas en el retículo y, a menudo, se vacía su contenido en el medio extracelular. Su función es la secreción.

Células Eucariotas y el Núcleo

Las células del cuerpo humano, al igual que las de animales, plantas, hongos y protistas, son células eucariotas. Esto significa:

  • El núcleo está separado del resto del citoplasma por una membrana que lo rodea.
  • El citoplasma se divide en compartimentos, es decir, se compone de elementos delimitados por una membrana, que llamamos orgánulos.

El núcleo de la célula es la estructura que mejor se aprecia. Es grande en comparación con otros elementos, y normalmente tiene una forma esférica y se sitúa en el centro.

Componentes del Núcleo

En el núcleo se puede distinguir:

  • Envoltura nuclear: Se trata de una doble membrana interrumpida por poros que permiten el intercambio de sustancias entre el núcleo y el citoplasma.
  • Nucleoplasma: Es el contenido del núcleo. Se trata de una solución en la que se encuentran la cromatina y los nucléolos.
  • Cromatina: Se compone de un conjunto de filamentos muy largos que se ensamblan en el interior del núcleo. Cada filamento consta de una molécula de ADN que contiene la información genética heredada de la célula. La cromatina se tiñe con colorantes. Cuando una célula se divide para formar dos células hijas, los filamentos de cromatina se contraen y forman estructuras más cortas y gruesas llamadas cromosomas. En el núcleo de cada célula del cuerpo humano hay 46 filamentos de ADN, que forman 46 cromosomas, excepto en las células reproductoras o gametos, que tienen 23.
  • Nucléolos: Son áreas fundamentales en las que se producen los ribosomas. Su forma es esférica.

Transporte y Metabolismo Celular

Transporte a Través de la Membrana

La membrana plasmática tiene una permeabilidad selectiva, es decir, permite el paso de algunas sustancias y evita el de otras.

Las moléculas más pequeñas atraviesan la membrana plasmática a través de dos mecanismos diferentes:

  • Difusión: Es el mecanismo por el cual algunas moléculas pequeñas, tales como el oxígeno o el dióxido de carbono, atraviesan libremente la membrana plasmática. Si estas moléculas tienen una menor concentración en el interior de la célula que en el medio extracelular, entran en la célula; de lo contrario, salen de la célula. Las concentraciones en ambos lados de la membrana tienden a igualarse.

La ósmosis es una forma especial de difusión. Es la difusión de agua a través de una membrana desde una solución diluida a una más concentrada. Las concentraciones de ambas partes tienden a igualarse.

  • Transporte activo: A veces, una célula necesita sustancias que existen en concentraciones más bajas en el medio extracelular que en el interior. En estos casos, la membrana puede transportar sustancias a través de un proceso contrario a la difusión, es decir, desde el lugar de menor concentración a donde es mayor. Este transporte representa un gasto de energía para la célula.

Las partículas de gran tamaño no pueden atravesar la membrana para entrar en la célula. La membrana se hunde e incluye la partícula, formando una pequeña bolsa que se incorpora al citoplasma. Este proceso se llama endocitosis.

El proceso opuesto, en el que la célula vacía su contenido al exterior, es la exocitosis.

Metabolismo

El conjunto de reacciones químicas que ocurren dentro de la célula constituye el metabolismo celular.

Se distinguen dos tipos de procesos metabólicos:

  • Catabolismo: El conjunto de reacciones cuyo fin es degradar las moléculas complejas y transformarlas en otras más simples para liberar la energía que contienen. La respiración celular es un ejemplo catabólico.
  • Anabolismo: El conjunto de reacciones cuyo objetivo es la construcción de moléculas complejas a partir de otras más sencillas. Utiliza la energía producida en el catabolismo. La producción de proteínas es un ejemplo.

Las células toman de su entorno las sustancias necesarias para el metabolismo y expulsan los desechos que se producen.

En los organismos unicelulares, la célula realiza estos intercambios directamente con el ambiente externo. En un organismo multicelular, la gran mayoría de las células no están en contacto directo con el ambiente externo.

Intercambio de Nutrientes y Residuos en Organismos Multicelulares

Cada célula de nuestro cuerpo está rodeada por un líquido que facilita el intercambio: el líquido extracelular, que constituye el ambiente interno. Los diferentes sistemas de nuestro cuerpo son responsables de suministrar nutrientes al medio ambiente interno y de derivar los residuos.

En un organismo multicelular, el número de células aumenta por división celular. Una célula se divide y da lugar a dos células hijas. Una se especializa para hacer un trabajo especial y, a menudo, pierde la capacidad de dividirse. La otra mantiene su capacidad de dividirse y, por lo tanto, garantiza el crecimiento del organismo y la renovación celular.

Los cambios en la forma y el interior de una célula especializada la hacen adecuada para realizar una función en particular.

Las células especializadas de un organismo multicelular no son capaces de vivir independientemente.

Organización del Cuerpo: Tejidos y Órganos

Para alcanzar mejor su función, las células especializadas del mismo tipo se agrupan y trabajan en conjunto para formar un tejido.

Un tejido incluye no solo las células, sino también la sustancia que ellas mismas producen. Esta sustancia llena los espacios entre las células y se llama sustancia intercelular.

Un tejido es una agregación de células, normalmente del mismo tipo, dispuestas a realizar una función común.

Las células de nuestro cuerpo se organizan en uno de los cuatro tejidos principales: epitelial, conectivo, muscular y nervioso. Dentro del tejido conectivo, a su vez, se distingue el tejido conjuntivo, el cartílago y el hueso.

Tejidos Principales

Tejido Epitelial o Epitelio

Cubre tanto la superficie externa del cuerpo como los órganos internos y externos. Sus células se disponen una junto a la otra, con poca sustancia intercelular. Hay dos tipos de epitelio:

  • Epitelio de cubierta: Se compone de varias capas de células, como la piel, o por una sola, como los capilares. El epitelio tiene una función protectora.
  • Epitelio glandular: Formado por células epiteliales especializadas que producen y secretan sustancias. Estas células suelen agruparse y formar estructuras llamadas glándulas, como las glándulas sebáceas, que producen grasa.

Tejido Nervioso

Forma el cerebro, la médula espinal y los nervios. Se encarga de reunir información tanto del exterior como del interior del cuerpo y de transmitirla de un lugar a otro del organismo para desarrollar respuestas apropiadas en cada caso.

Las células nerviosas principales son las neuronas, que tienen forma de estrella con una extensión larga. El espacio entre las neuronas es ocupado por las células gliales, un conjunto de células que realizan diversas funciones de apoyo, protección y nutrición de las neuronas.

Tejidos Conectivos

Desempeñan funciones de soporte y unión. Se caracterizan porque las células están rodeadas de abundante sustancia intercelular que tiene muchas fibras producidas por las células.

  • Tejido Conjuntivo: Es el material de relleno del cuerpo. Se encuentra en la capa más profunda de la piel y ocupa los espacios entre los órganos. Un tipo especial de tejido conjuntivo es el adiposo (grasa).
  • Tejido Cartilaginoso o Cartílago: Es el principal componente del esqueleto de los embriones. En el adulto se encuentra en las articulaciones de los huesos, la tráquea, la nariz, los oídos y los discos intervertebrales. Realiza funciones de apoyo.
  • Tejido Óseo: Es el componente esencial de los huesos de un adulto. Es el más fuerte de los tejidos conectivos, ya que la sustancia intercelular contiene sales de calcio, es decir, está mineralizada.

Tejido Muscular

Es el principal componente de los músculos y causa los movimientos de diferentes partes del cuerpo. Sus células son alargadas y se denominan fibras musculares. Hay tres tipos:

  • Músculo estriado esquelético: Forma los músculos que se unen a los huesos y producen el movimiento. Su contracción es voluntaria.
  • Tejido muscular estriado cardíaco: Compone las gruesas paredes del corazón. A diferencia del esquelético, su contracción es involuntaria.
  • Tejido muscular liso: Se encuentra en la pared del estómago, los vasos sanguíneos, el útero o la vejiga. Su contracción es involuntaria.

Órganos y Sistemas

Un órgano está compuesto por dos o más tejidos diferentes. Los tejidos se agrupan para realizar una nueva función que cada uno de ellos no podría cumplir por separado.

Un conjunto de órganos, cuya actividad está estrechamente relacionada para desarrollar una función compleja, constituye un aparato o sistema de órganos.

Además del sistema digestivo, existen otros sistemas en nuestro cuerpo, como el circulatorio, el nervioso y el respiratorio.

Un cuerpo se compone de órganos y sistemas de órganos que trabajan de forma coordinada.

Trasplante de Órganos y Tejidos

El trasplante consiste en sustituir un órgano enfermo, que pone en peligro la vida de una persona (receptor), con uno que funcione correctamente.

No siempre es necesario sustituir todo el órgano; a veces es suficiente con el trasplante de tejidos o células.

Un trasplante necesita un receptor y un donante.

El donante normalmente es una persona que tiene muerte cerebral, es decir, una persona que ha fallecido, pero cuyo corazón sigue latiendo artificialmente para que los órganos destinados al trasplante se encuentren en buenas condiciones.

En algunos casos, el donante puede ser una persona que sigue viva después de la donación. Esto puede suceder cuando el receptor necesita:

  • Fuentes de tejidos, como piel, sangre o médula ósea.
  • Una parte de un órgano que es capaz de regenerarse, como el hígado.
  • Un órgano prescindible, como el riñón, ya que una persona puede vivir con uno solo.

Es esencial que el donante y el receptor sean lo más comparables posible, es decir, que sean compatibles. De lo contrario, se produce el rechazo. El receptor intenta defenderse de los cuerpos extraños y destruirlos, y el rechazo puede causar su propia muerte. Este proceso es llevado a cabo por nuestras defensas.

Tipos de Trasplantes

De acuerdo con la relación entre el donante y el receptor, los trasplantes se denominan:

  • Autoinjerto o autotrasplante: Donante y receptor son la misma persona. Se utiliza en caso de tejidos o partes de órganos como la piel, huesos, vasos sanguíneos o médula ósea.
  • Isotrasplante: Los donantes y los receptores son gemelos idénticos. Como son genéticamente idénticos, al igual que en el caso de los autoinjertos, no hay rechazo.
  • Alotrasplante (Alo-Tx): Donante y receptor son de la misma especie, pero no son genéticamente idénticos. Este tipo de trasplante es el más común.
  • Xenotrasplante: Donante y receptor son de especies diferentes. Un ejemplo es la utilización de válvulas de corazón de cerdo en humanos.

Nutrición y Alimentos

Los alimentos que ingerimos aportan los nutrientes indispensables para obtener la energía y la materia necesarias para cumplir con su función y renovarse.

Los alimentos son productos naturales o elaborados que proporcionan las sustancias que nuestras células necesitan para vivir.

Tipos de Nutrientes según su Composición Química

  • Sustancias inorgánicas: Agua y sales minerales.
  • Sustancias orgánicas: Glúcidos (carbohidratos), lípidos (grasas), proteínas y vitaminas.

Clasificación de Alimentos

Según su composición, los alimentos se pueden clasificar en:

  • Alimentos simples: Están formados por un solo tipo de sustancia alimenticia. Ejemplos: el aceite, el azúcar.
  • Alimentos compuestos: Están formados por diferentes sustancias alimenticias. Ejemplos: el pan, la leche.

Componentes Inorgánicos

Los componentes inorgánicos no son materia viva típica. Son dos:

  • Agua: Es el compuesto más abundante en los seres vivos y el medio en el que se desarrolla la vida de las células. Nuestro cuerpo pierde agua continuamente y necesita reponerla con la alimentación. Bebemos agua, además de que todos los alimentos la contienen en mayor o menor medida.
  • Sales minerales: Cloruros, carbonatos, fosfatos, etc. Forman parte de los huesos y les dan firmeza. También hay sales disueltas en todos los líquidos del cuerpo, como la sangre o el sudor.

Componentes Orgánicos

Los constituyentes orgánicos de los alimentos son:

  • Glúcidos (Carbohidratos): Glucosa, maltosa, etc. Los glúcidos simples tienen sabor dulce, por lo que se conocen como azúcares. La glucosa es un carbohidrato simple que no se puede descomponer más. La maltosa está formada por la unión de dos moléculas de glucosa. El almidón y la celulosa son glúcidos complejos que no tienen sabor dulce. Sus moléculas son muy grandes, producto de la unión de muchas moléculas de glucosa.
  • Lípidos (Grasas): Grasas o colesterol. Son sustancias que no se disuelven nada o muy poco en agua. Los lípidos de fuente vegetal y no saturados son líquidos a temperatura ambiente normal y se llaman aceites. Los de origen animal o grasas saturadas, como la mantequilla, son sólidos y se conocen como sebos. Una molécula de grasa se puede descomponer en sustancias más simples: una glicerina y ácidos grasos.
  • Proteínas: Hemoglobina o gluten. Son macromoléculas formadas por la unión de centenares o miles de moléculas más sencillas, los aminoácidos. Existen muchas proteínas diferentes. La diferencia de una proteína a otra radica en el número, el tipo y la disposición de los aminoácidos que la componen.
  • Vitaminas: Son sustancias orgánicas que necesitamos en cantidades muy pequeñas, pero que son imprescindibles para el correcto funcionamiento del cuerpo. Como no podemos fabricarlas, debemos obtenerlas de los alimentos que las contienen.

Los alimentos están constituidos por compuestos que nuestros cuerpos ya poseen, así como por sustancias complejas. Los alimentos complejos deben ser transformados previamente en nutrientes más simples para que nuestras células puedan utilizarlos. Esta transformación se produce en el sistema digestivo.

El Sistema Digestivo

El sistema digestivo está formado por el tubo digestivo y las glándulas digestivas.

El tubo digestivo es un conducto muscular que se extiende desde la boca hasta el ano.

Partes del Tubo Digestivo

  • Boca: Es la abertura que contiene los dientes y la lengua. Los dientes se ajustan en los maxilares y son de un material similar al hueso, la dentina, que está recubierta por esmalte. Su parte interna, la pulpa dentaria, contiene las terminaciones nerviosas y los vasos sanguíneos que nutren la dentina. La lengua está formada por potentes músculos y abundantes receptores del sentido del gusto.
  • Faringe: Es una cavidad de articulación entre el sistema digestivo y el respiratorio. Por ella pasa el alimento desde la boca hasta el esófago y el aire desde la nariz o la boca hasta la laringe.
  • Esófago: Es el conducto que hace avanzar el alimento desde la faringe hasta el estómago.
  • Estómago: Es un ensanchamiento del tubo digestivo, doblado en forma de J. Sus paredes tienen músculos muy potentes y, cuando está vacío, tiene numerosos pliegues que desaparecen al llenarse. La entrada del alimento desde el esófago se logra a través de una válvula, el cardias. Otra válvula, el píloro, lo comunica con el intestino delgado.
  • Intestino delgado: Es un tubo largo, plegado varias veces, que se comunica con el estómago y el intestino grueso. La parte del intestino delgado que sigue al estómago se llama duodeno, que en el ser humano tiene una longitud de unos 25 cm.
  • Intestino grueso: Es un conducto más grueso que el intestino delgado, al que rodea. Las partes fundamentales que lo forman son el ciego y el colon. En la unión del colon con el intestino delgado se encuentra el ciego, una bolsa que lleva en su extremo una fina extensión llamada apéndice. La comunicación del colon con el exterior se realiza por el recto, que remata en el ano.

Glándulas Digestivas

Las glándulas digestivas son órganos encargados de producir zumos digestivos y verterlos al interior del tubo digestivo.

Estos líquidos contienen una variedad de sustancias, entre las que destacan las enzimas digestivas, que son un tipo de proteína que acelera la descomposición de las sustancias complejas de los alimentos en sus componentes simples (nutrientes).

Las glándulas digestivas se presentan de dos formas:

  • Repartidas por la pared del tubo digestivo: Así sucede con las glándulas gástricas de la pared del estómago y las glándulas intestinales de la pared del intestino.
  • Fuera del tubo digestivo: Se llaman glándulas anexas. Son:
    • Glándulas salivales: Comprenden 3 pares de glándulas cuyos conductos desembocan en el interior de la boca. Producen saliva.
    • Páncreas: Glándula con forma de hoja, situada en la parte izquierda del cuerpo, debajo del estómago. Produce zumo pancreático y lo vierte al duodeno. Además del zumo digestivo, el páncreas produce insulina. Esta hormona se vierte directamente a la sangre y regula la cantidad de glucosa que contiene.
    • Hígado: Es la glándula más grande, situada a la derecha del cuerpo, junto al estómago. Produce bilis, que se almacena en la vesícula biliar y se vierte al duodeno cuando viajan alimentos ricos en grasas. La bilis no contiene enzimas digestivas, pero logra un efecto de jabón parcial en las grasas: las fragmenta en gotas pequeñísimas que se mantienen dispersas. Esto facilita la acción de los zumos digestivos en la grasa. El hígado también almacena glúcidos, vitaminas y contribuye a la eliminación de la sangre, medicamentos o sustancias tóxicas como el alcohol.

El Proceso de la Digestión

La digestión es la transformación que experimentan los alimentos a su paso por el tubo digestivo. La digestión puede ser mecánica o química.

Digestión Mecánica

Incluye un conjunto de acciones que reducen el tamaño físico de las partículas alimenticias y las hacen moverse a lo largo del tubo. Estas acciones son fundamentalmente:

  • Masticación: Se realiza en la boca.
  • Deglución: Es el paso del alimento desde la boca a través de la faringe hasta el esófago. Al mismo tiempo, la laringe se cierra para impedir que el alimento pase a las vías respiratorias.
  • Movimientos: Provocados por las contracciones de los músculos de la pared del tubo digestivo. Son:
    • De mezcla: Ponen en contacto las partículas de alimento con los zumos digestivos.
    • Peristálticos: Hacen avanzar el alimento a lo largo del tubo.

Digestión Química

Es la transformación de macromoléculas en moléculas pequeñas de nutrientes solubles. Es un proceso químico acelerado por las enzimas contenidas en los zumos digestivos. Tiene lugar en:

  • La boca: Donde la saliva, que contiene una enzima llamada amilasa, comienza la digestión de los glúcidos.
  • El estómago: Donde el alimento se almacena y se mezcla con el zumo que producen las glándulas gástricas de la pared. Este zumo contiene ácido y una enzima, la pepsina, que inicia la digestión de las proteínas.
  • El intestino delgado: Donde se completa el proceso. Los zumos procedentes del páncreas y las glándulas intestinales se vierten al duodeno. Estos zumos contienen enzimas como la lipasa, que descomponen las grasas y completan otros procesos de transformación de los glúcidos y las proteínas.

Resultado de la Digestión y Absorción

Los alimentos se convierten en nutrientes durante la digestión. Luego pasan a la sangre y son transportados hasta todas las células del cuerpo.

Absorción Intestinal

El paso de los nutrientes desde el tubo digestivo a la sangre sucede fundamentalmente en el intestino y recibe el nombre de absorción intestinal.

  • La mayoría de los nutrientes orgánicos se absorben en el intestino delgado. Es un proceso relativamente rápido, ya que su gran superficie interna facilita el contacto entre los nutrientes y la pared. Esta gran superficie se debe a varios factores:
    • La gran longitud del intestino delgado.
    • Los numerosos pliegues de su cara interna, que a su vez está llena de pequeños pliegues, las vellosidades intestinales. Estas vellosidades tienen forma de dedo y dan un aspecto aterciopelado.
  • Gran parte del agua y las sales minerales se absorben en el intestino grueso. Allí habitan bacterias, llamadas flora intestinal, que fabrican algunas vitaminas que después son asimiladas en el colon.

Formación de Heces

Existen sustancias en los alimentos que no podemos digerir y, por lo tanto, absorber. Aquellos restos que no pudieron ser digeridos o absorbidos forman parte de las heces y son expulsados del cuerpo a través del ano mediante un mecanismo denominado defecación.

La Dieta y sus Funciones

El conjunto de todos los alimentos que consumimos diariamente es nuestra dieta.

Una dieta equilibrada aporta todos los tipos de nutrientes en cantidades adecuadas para mantener nuestro cuerpo en buen estado y asegurar un desarrollo correcto.

Funciones de los Alimentos

Las funciones de los alimentos son según los nutrientes que aportan:

  • Función plástica (Estructural): Se utilizan para formar parte de nuestra propia materia y así crecer y reponer la materia perdida. La realizan los alimentos ricos en proteínas o sales minerales.
  • Función energética: Liberan energía y así podemos obtenerla para el trabajo muscular o para mantener la temperatura del cuerpo. La realizan los alimentos con abundantes glúcidos o lípidos.
  • Función reguladora: Permiten que todos los procesos que tienen lugar en nuestro cuerpo se desarrollen normalmente. La realizan los alimentos que proporcionan sales minerales y vitaminas.

La Rueda de los Alimentos

Para conseguir una dieta equilibrada, los alimentos se distribuyen en grupos según el tipo de nutriente que aportan y su función en el cuerpo. Esta clasificación se conoce como la Rueda de los Alimentos.

  • Los grupos rojos (1 y 2) contienen alimentos ricos en proteínas que desempeñan funciones plásticas.
  • Los grupos amarillos (6, ricos en glúcidos, y 7, ricos en lípidos) cumplen una función energética.
  • Los grupos verdes (4 y 5) contienen alimentos ricos en vitaminas y sales minerales y cumplen funciones reguladoras.
  • El grupo naranja (3) comprende alimentos con todos los nutrientes, por lo que realizan funciones plásticas, reguladoras y energéticas.

La Dieta Mediterránea: Un Modelo Equilibrado

Recibe el nombre de dieta mediterránea aquella forma tradicional de alimentación que se sigue en países como España, Portugal o Italia.

En ella están presentes los siguientes nutrientes:

  • Los glúcidos, base de esta dieta, son aportados por:
    • Cereales como el arroz y sus derivados (pan y pasta).
    • Legumbres como las lentejas o los frijoles.
    • Frutas y verduras.
  • Las proteínas proceden más de pescado que de carne.
  • La principal grasa utilizada es el aceite de oliva.
  • El aporte esencial de vitaminas y sales minerales procede también de frutas y verduras frescas.

Los factores más beneficiosos de la dieta mediterránea, según los expertos, son:

  • La mayor parte de la energía es aportada por glúcidos complejos; los lípidos proporcionan una cantidad menor (previniendo la obesidad).
  • Entre los lípidos, predominan las grasas no saturadas sobre las grasas saturadas, lo que previene enfermedades cardiovasculares.
  • Frutas y verduras frescas, junto con legumbres y cereales integrales, proporcionan una cantidad adecuada de fibra alimentaria, previniendo el estreñimiento.

Métodos de Conservación de Alimentos

  • Envasado al vacío: Empaquetar los alimentos en recipientes a los que se les extrae el aire que contienen.
  • Deshidratación: Eliminar el agua del alimento para impedir el desarrollo de microorganismos.
  • Calor:
    • Esterilización: Someter los alimentos a temperaturas entre 110 °C y 120 °C para eliminar todos los gérmenes.
    • Pasteurización: Calentar a 72 °C durante 15 segundos y enfriar rápidamente después.
  • Frío: Mantener los alimentos en temperaturas bajas, por encima de 0 °C (refrigeración) o por debajo de 0 °C (congelación), para imposibilitar el desarrollo de gérmenes.
  • Aditivos: Impedir el desarrollo de microorganismos mediante la adición de sustancias químicas o aditivos artificiales.

El Sistema Respiratorio

El sistema respiratorio es responsable de hacer circular el aire entre el cuerpo y el medio externo. Los conductos por los que circula el aire en el sistema respiratorio se llaman vías respiratorias:

  • Las vías respiratorias superiores incluyen la nariz, la faringe y la laringe.
  • Las vías respiratorias inferiores incluyen la tráquea, los bronquios y los bronquiolos que terminan en los alvéolos.

El sistema respiratorio está formado por las vías respiratorias y los pulmones, que están alojados en la cavidad torácica.

Recorrido del Aire en el Sistema Respiratorio

  • Nariz y boca: Son las vías de entrada del aire. Desde allí, el aire pasa a la faringe, una cavidad articular con el sistema digestivo. Desde este punto, el aire recorre un camino independiente al de los alimentos.
  • Laringe: Tiene forma de embudo y su pared dura de cartílago se palpa en la parte anterior del cuello. En su interior se encuentran las cuerdas vocales, que vibran al paso del aire y producen la voz.
  • Tráquea: Es un tubo flexible que permanece siempre abierto al paso del aire.
  • Pulmones: Son dos órganos situados en la cavidad torácica y protegidos por las costillas. Tienen forma cónica y su base, ligeramente cóncava, se apoya en el diafragma.
  • Bronquios y bronquiolos: Son tubos que se ramifican de la tráquea. Inicialmente son dos y se denominan bronquios. A medida que se subdividen, se hacen cada vez más delgados y se llaman bronquiolos.
  • Alvéolos pulmonares: Son pequeñas bolsas de pared delgada situadas al final de los bronquiolos más finos. Están rodeados de una red infinita de capilares sanguíneos.

Intercambio de Gases

El oxígeno contenido en el aire de los alvéolos atraviesa su pared, muy fina, y pasa a la sangre. El dióxido de carbono recorre el camino inverso: desde la sangre pasa al interior de los alvéolos.

En el intercambio de gases, las paredes de los alvéolos y los capilares no intervienen activamente. Los gases atraviesan estas paredes por difusión simple, desde el lugar donde su concentración es superior hacia el lugar donde su concentración es menor. Por ello, no hay intercambio de nitrógeno, ya que se observa igual concentración en el interior de los alvéolos que en la sangre.

El oxígeno pasa de los alvéolos a la sangre por difusión simple, y el dióxido de carbono entra en sentido inverso por el mismo mecanismo.

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